martes, 13 de mayo de 2008

Del amor y cosas de cada sexo

Podríamos ponernos nerds y decir que filosóficamente es un acto de la voluntad que busca el bien propio y del otro. Psicológicamente algunos dirían que en ese encuentro con el otro es cuando conoces a tu verdadero yo.

Podríamos ponernos químicos y hablar de las ferormonas, salir con cursiladas de corazoncitos y maripositas, profundizar al recordar la frase de la canción de Bryan Adams que habla de que "en sus ojos puedes ver a sus/vuestros hijos que aún no han concebido"...

Podríamos declararnos cínicos y dudar que realmente exista algo tan bueno y afirmar que sólo hay dos tipos de seres humanos: los egoistas que fingen amar y ser felices, y los que asumen su condición egoista incapaz de amar y son verdaderamente felices.

Podríamos acabar con este rollo si se asume que no existe.

Pero esto como la feria, cada uno habla según le fue. La duda está en cómo saber si tu espos@ te ama:

Tal vez es porque incluso cuando te despiertas cual león de la MGM te sigue viendo guapa y te lo dice, lo peor es que si te vez en el espejo, aunque tengas muy bien desarrollada tu autoestima, sabes que eso es amor.

Qué decir de cuando estás enferm@ y te sigue dando la mano aunque esté llena de mocos o te abraza aunque se lo puedas pegar o renuncia a ver la peli que lleva queriendo ver desde hace 2 semanas. Además, tienes la cara con ojeras, la nariz cual Rudolph y la voz del gangosito de los chistes... pero sigue enamorad@ y diciéndote que estás guap@,

También puedes reconocer que te quieren porque cuando estás emberrichad@ o equivocad@ te lo sabe hacer ver y te da tu espacio. Esto es, aunque te acepte como eres " te obliga a ser un sant@" diría Luis Mi. Bueno y a veces simplemente es sant@ porque te aguanta a pesar de que te sale lo Grinch.

Un síntoma decisivo es que está dispuest@ a comprometerse contigo toda la vida, a pesar de tener que renunciar a muchas cosas que para muchos significan perder la libertad pero para él/ella ganan mucha más.

Por último, otro síntoma de esto del amor que algunos llaman "enfermedad" es que le importan los detalles más triviales e irrelevantes que le quieras contar:
  • (Lo que él escucha) Que ibas caminando con medias de esas que llegan al muslo, pero que están tan lavadas que el resorte/encaje que se agarra a la pierna no sirve. El problema es que te das cuenta cuando ya es demasiado tarde, y pues, pasa lo que pasa... Se caen y se caen, claro la relatividad no falla, ni si quiera cuando tu vanidad está en juego. Mientras, tú tienes que hacer todas las maniobras para subírtelas a media calle, con la mirada fija del viejito que no tiene nada que hacer más que sentarse en la banquita mirar. Así que tú disimuladamente (bueno, no tanto) las interceptas varias veces cuando ya van por debajo de la rodilla, ¡¡¡asomándose por el dobladillo de la falda, saludándo al mundo!!!... Varias veces las coges y las subes... ¡Qué suplicio! Pero nuevamente... ¡Todo lo que sube tiene que bajar! Así que, imágínese la situación para poder llegar a la oficina que está a 7 calles: media derecha con problemas de identidad (ya no es lo que era), así que inmediatamente después de subir el tubo de tela elástica, metes ipsofactamente la mano en la bolsa derecha del abrigo para coger la falda y la media, hasta te pellizcas con tal de que no vuelva a bajarse. La cosa es que el remedio no es lo más indicado, pierdes el glamour, ¡caminas como si estuvieras coja o torcida!. Esto no te pasaría si hiciera calor porque no tendrías que ponértelas, ni tampoco sucedería si usaras de las completas... ¡Ah!, pero son antisexis...
  • (Lo que ella escucha) Que después de tremendo atracón de comida le entra un retortijón enoooorme, de camino a ver un cliente. Se para por el camino para ir al baño. Civilizadamente va al de hombres, pero casualmente hay tres tíos/gûeyes haciendo un concierdo sonidos estrambóticos y conviertiendo el aire en algo similar a una caballeriza. Claro, aquí lo que está en juego es la pulcritud del muchacho, ¡hombre! aunque sea de esos que conocen todos los baños públicos, tiene sus reglas de higiene. Así que visto el panorama decide asomarse al baño de mujeres, que por fortuna del destino, incumplía la regla uno - esencial: siempre hay cola/fila. Era como si se abriera el cielo y los angelitos tocaran el arpa, tres baños desocupados y ni una mujer... Así que decide, meterse a dar su propio concierto, evidentemente si hay que oler caballerizas que sea la propia... En fin, en eso entran 2 mujeres.... y ¿qué hacen 2 mujeres en un baño sin entrara a los que quedaban vacíos?... ¡Claro! Cumplir la regla 2: al baño no se va sola, porque se va a hablar. El hombre en cuestión quisiera irse porque además llegará tarde con el cliente, pero ahora es imposible... el chisme de las chicas es laaargo y tendido.... En su sufrimiento se da cuenta que la puerta tiene un hoyo por el que él las ve y ellas podrían verlo, pero casi que ni levantar los pies es necesario, están muy entradas, tanto que ni el "ambientador natural y el hilo musical" las hace irse... El tiempo transcurre lento, muy lento. Eso sí, cuanto salen, éste también corre para irse a lavar las manos al de hombres....claro, que no se diga que salió del de mujeres. De cualquier forma, al final del relato remarca, "bueno como que es otro país, siempre puedes decir que no entendiste"... (lo malo es que siempre te pueden decir que eres tonto, porque los dibujitos no cambian mucho que digamos)...
En fin, cosas como estas las escucha quien te quiere y poco más... De hecho, no creo que hayan llegado hasta acá, porque bueno, sabiendo que quien te ama es capaz de escuchar y leer tus rollos... aclaremos que aunque hayas leído todo ... si ya me están queriendo, pues sorry, ya estoy casada y sí tengo quien me escuhe.

Pero tu sigue buscando a quien amar y que te ame, o si ya lo encontraste pués cuídal@ y recuerda lo que decía Saint - Exupèry: "el amor no es mirarse el uno al otro a los ojos, sino mirar juntos a la misma dirección".



3 comentarios:

Anónimo dijo...

mmm... interesante articulo. Muy acertado.

Anónimo dijo...

gueris chula
Me gustaron tus comentarios sobre el amor y estoy de acuerdo en tus ideas, pero sobre todo me parece que lograste manejar el tema con mucho humor refiriendote a las cosas simples de la vida. ¡muy buena onda! ADC

Luz Ma Dollero Anaya dijo...

Espero que al menos si se ríen, lo leen mientras piensan y se divierten.

Qué bien que escriben ya comentarios!!!