No es que yo sea fan de Marvel... pero Thor me gustó.
Incluso hasta me pareció que tenía puntos interesantes para reflexionar...
Y es que no basta tener las mejores habilidades, el mejor aspecto físico, ser el popular, ser atrevido, decidido, perseverante si no se tiene control de uno mismo y los impulsos primarios, empatía, visión de futuro y humanidad.
Y es que no basta quererse a uno mismo y sentirse el el mejor...
El mejor no piensa sólo en sí mismo y en sus éxitos, sino que sabe reconocer sus errores y trabaja en ellos, sabe el valor del otro, lo respeta y lo impulsa sacar todo su potencial, lucha por el bien común.
El mejor no puede ser tal si no sabe amar y ser amado...
Esa es la grandeza del verdadero amor, nos transforma en mejores personas capaces de lograr lo inimaginable y nos hace acariciar la felicidad.
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