El otro día por la tarde llovía a bastante... De pronto ves al perrito paralizado en el puerta que va al jardín, asomado sin salir, observando atentamente y sin parpadear cómo caía la lluvia. Una persona le dice: "¡anda ya!!!! ¡Sal a hacer pipí rápido porque adentro no te vas a hacer". El perrito captando el mensaje tras voltear a ver a su amo, pensando: "qué lástima que me viste, porque ya tenía escogido el cachito de alfombra para perfumar"... Sale rápidamente hacia el jardín, bueno rápidamente mientras había techito en la terraza. En cuanto se acabó, empezó a modelar, bajó la velocidad y moviendo el culete de un lado a otro empezó a bajar los cinco escalones al jardín.
Huele el pasto buscando dónde hacer, bajando su nariz con glamour y en cámara lenta, pero no... no le gusta o no encuentra su pipiada anterior. Así que decide seguir camindando y oliendo... Mientras, yo me empiezo a poner nerviosa... ¡qué no se da cuenta que está mojando!!!! ¡Además uno de los peores olores en esta vida es el de perro mojado, que se apure y corra de vuelta!!!!
Sin embargo, ella no opinaba lo mismo, seguía buscando, me parece, inútilmente su pipiada precedente, borrada ya por el agüita que caía. Al final se decide a hacer al lado del primer lugar donde olió, para entonces regresar triunfante, a paso lento a la casa (tal vez ha escuchado eso de que te mojas más si corres...).
Total, todo esto para decirles que me queda claro la diferencia entre ser humano y perro... Yo de tener que hacer en el pastito, sería bajando el primer escalón y volvía corriendo. No sé, no se me hizo muy inteligente de su parte... pero bueno, eso sí, nos hizo reír...
No hay comentarios:
Publicar un comentario